lunes, 28 de octubre de 2013

Reino de España e Indias (11). La bahía de Maldonado, en Uruguay: puerta de entrada al Río de la Plata durante los siglos XVI a XIX.

Tal como se dijo en el artículo anterior de esta misma serie, la Patagonia y las Islas Malvinas eran bien conocidas, habían sido exploradas y pobladas, incluso desde hacía milenios. Lo mismo ocurría con la Banda Oriental, al Este del río Uruguay. Pero para los países europeos una región del mundo que no se encontrara bajo la tutela de un monarca poderoso, o que no pudiera defenderse, era interpretada como ''tierra de nadie'' por más explorada y poblada que hubiese sido. Por este motivo, durante el siglo XVIII, la Corona española proyectó y e impulsó, en el caso de la Banda Oriental, ciudades y fuertes costeros, que, a futuro, aseguraron la soberanía del Estado uruguayo sobre nuestro territorio.

El país de los charrúas y de los guaraníes

De la misma forma que la Patagonia era la patria independiente de los tehuelches, Uruguay era la Banda de los charrúas y de las Misiones guaraníes. El territorio estaba en poder de los indígenas que eran diez veces más numerosos que los españoles, criollos y mestizos juntos.





































La Banda Oriental del Uruguay en 1606.
Al norte, las Misiones del Guairá





















































Los fuertes y ciudades se encontraban en la costa, siendo las ciudades fortificadas más importantes, Maldonado en el Sureste, en la bahía de Maldonado, Montevideo en el Sur, en la bahía de Montevideo, y Colonia, sobre la desembocadura del Río Uruguay. La bahía de Maldonado era una auténtica puerta de entrada al Río de la Plata para aquellas naves que venían del Atlántico. Tanto Maldonado como Montevideo, cumplían una función importantísima en la vigilancia y defensa de la Patagonia y de las Islas Malvinas.



















Como también vimos en un artículo anterior (''¿Quiénes conquistaron y defendieron el Río de la Plata en realidad?'') los indígenas de la Banda Oriental casi siempre eran aliados de los españoles en la defensa de su propio territorio, rechazando incursiones de piratas franceses, ingleses y holandeses. El 7 de agosto de 1680 los tercios del Cacique Amandaú tomaron la ciudad portuguesa de Colonia del Sacramento, lo cual tuvo una enorme repercusión en Europa.

La ciudad de Maldonado, bastión del Río de la Plata

Este video nos explica el valor estratégico de la bahía de Maldonado, puerta de entrada al Río de la Plata, y la heroica defensa de sus guarniciones, que supieron resistir incluso a las invasiones inglesas a principios del siglo XIX.

Reino de España e Indias (10) Formación de centros poblados en la Patagonia argentina y las Islas Malvinas durante el siglo XVIII.

Como vimos en artículos anteriores de esta misma serie, la Patagonia y las Islas Malvinas eran bien conocidas, habían sido exploradas y pobladas, incluso desde hacía milenios. Pero para los países europeos una región del mundo que no se encontrara bajo la tutela de un monarca poderoso, o que no pudiera defenderse, era interpretada como ''tierra de nadie'' por más explorada y poblada que hubiese sido. Por este motivo, en la segunda mitad del siglo XVIII, la Corona española proyectó y e impulsó la formación de diversas colonias en la Patagonia y las Islas Malvinas, asegurando, a futuro, la soberanía argentina e indígena en la región.

Proyectos que surgen junto con la fundación del Virreinato del Río de la Plata

En 1776, Juan José Vértiz ordenó hacer un reconocimiento de la Bahía Sin Fondo, de la Bahía San Julián y de parajes aptos para su poblamiento. El 14 de mayo de 1776, expidió título de Comisario y Jefe Superior de las Nuevas Poblaciones a Juan de la Piedra, y de Superintendente a Francisco de Viedma. El 22 de julio se publicó otra Orden Real para organizar la venida de inmigrantes desde Europa.

Mapa del cartógrafo Juan de la Cruz Cano y Olmedilla, año 1775.






































El 7 de enero de 1777, la expedición llegó a la Bahía Sin Fondo, a los 41º 30' de latitud Sur. Se hizo reconocimiento del río Colorado y en el río Negro se estableció la nueva población. El mismo procedimiento se siguió en los puertos de Santa Elena y Deseado, y en el golfo de San Jorge.

Desde Montevideo, Francisco de Viedma o Biedma elevó a Madrid un proyecto donde enumeraba las consecuencias positivas que podía tener la colonización en lo que se refiere a la pesca de la ballena, el abasto de sal a Buenos Aires, el fomento del comercio de carnes, la apertura de un puerto de arribada, almacenes de abastecimiento a la navegación, y apertura de rutas por mar y tierra hacia Chile. Planteaba, además, que el proyecto protegería las fronteras de Buenos Aires de la piratería inglesa.

El 1º de agosto de 1780, Viedma desembarcó en el puerto de San Julián; el 20 de febrero en el puerto de Santa Elena; el 6 de marzo en el de San Gregorio; el 3 de mayo en Puerto Deseado. El 4 de julio comunicaba estos actos al Ministro José Gálvez.

El 15 de abril de 1781, salió del puerto de La Coruña la fragata San José y Buenaventura, cuyo Capitán era Juan Acosta, con 500 colonos, entre ellos, niños menores de 2 años, en su mayoría de origen maragato, es decir, leonés.

Maragatos de Astorga, León. Créditos:  Rodelar
''Redeira''. (Galicia)
Créditos: Ramón Piñeiro.


















El Intendente de Buenos Aires, Miguel Ignacio Fernández, recibió la orden de tener preparados dinero, arados y mantenimientos para cuando llegasen al Río de la Plata. El piloto Basilio Villarica era el encargado del reconocimiento topográfico.

Entre el 22 de abril de 1779 y el 24 de abril de 1782, se fundaban así, en un solo acto, el Fuerte de Viedma o Mercedes de Patagones (por la Virgen de la Merced) y Nuestra Señora del Carmen de los Patagones, del nombre del bergantín que los condujo hasta el lugar, Nuestra Señora del Carmen y Ánimas, formada cuando una inundación obligó a trasladar a los colonos a la orilla norte del río Negro. Las demás poblaciones fundadas fueron San Julián, Río Negro, San José, San Antonio y Santa Cruz.

Carmen de Patagones en la comarca de Viedma
en la actualidad.













El 19 de abril de 1780, Antonio de Viedma fundó, cerca del puerto de San Julián, la Nueva Colonia y Fuerte de Floridablanca, a los 49° 14' 1' de latitud Sur, con la finalidad de que los ingleses no pudieran establecerse en la bahía de San Julián, frente a las Islas Malvinas.

Ubicación del puerto de San Julián, descubierto
por Magallanes el 31 de marzo de 1520.

24 familias de origen castellano, unas 150 personas de las cuales el 24% eran labradores, y 7% artesanos y albañiles, salieron de La Coruña en el bergantín San Francisco de Paula, con la finalidad de fundar una colonia agrícola. Se solicitó al Cacique aonikenk Julián Grande que los guiara hasta un lugar donde pudieran disponer de agua dulce.

Todas las familias recibieron iguales parcelas e iguales cantidades de semillas y de instrumentos de labranza. Los primeros cultivos de cereales y hortalizas se recogieron en 1782, y además se celebró la primera boda. Para completar la dieta cazaban guanacos, ñandúes y pescaban. Otros artículos de subsistencia les llegaban desde Montevideo y Buenos Aires. Además hicieron amistad con los aonikenk. 

Es de lamentar que una serie de circunstancias críticas, que no se conocen bien, y se están estudiando, obligaran a despoblar el lugar en 1784.

Acuerdo con Francia para establecer una colonia en las Islas Malvinas (1764-1767)

''El 1 de abril entregué nuestro establecimiento a los españoles, que tomaron posesión de él enarbolando la bandera de España [...] Yo había leído a los franceses habitantes de esta colonia naciente, una carta del Rey, por la que S. M. les permitía quedarse bajo el dominio del Rey Católico [...] este Monarca, tan justo como generoso, ha querido reembolsarnos de nuestros adelantos, y la suma supradicha [más de 600.000 libras] nos ha sido entregada por sus tesoreros, parte en París, y el resto, en Buenos Aires”. Bougainville, 4 de octubre de 1766.

''Muy Señor mío [Sr. Gobernador de Buenos Aires][...] se les hizo saber [a los franceses] por dicho Gobernador [francés] y por mí, el Real Aviso de Sus M.M.C. y Cristianísima sobre la libertad de elegir vasallaje, bajo el mismo goce y circunstancias que disfrutan, consecuente a lo que, sucesivamente se alistaron los individuos franceses que comprende la adjunta relación, con cuyos costos, pactos, y contratas que en ella expresaban, arregladas a la noticia que M. Bougainville me suministró, lo participo a V.E. para su inteligencia. Nuestro Señor guarde muchos años, Islas Malvinas abril 25 del 1767. FELIPE RUIZ PUENTE''.

La colonia francesa de Port Saint-Louis, fundada por Louis-Antoine de Bougainville en la Isla Soledad, el 17 de marzo de 1764, se transformó a partir del 1º de abril de 1767, en Puerto San Luis en la Malvina Oriental o Isla Soledad. Algunos colonos franceses decidieron regresar a Francia; otros se establecieron en Montevideo, y un grupo de 15 personas permaneció en Puerto San Luis. Felipe Ruiz Puente quedó encargado del Gobierno local, bajo la jurisdicción de la Gobernación y Capitanía General de Buenos Aires, siendo en aquel entonces Gobernador, Francisco de Paula Bucarelli y Ursúa.

En la misma fecha, desempeñaba por segunda vez el cargo de Gobernador de Montevideo, José Joaquín de Viana, nombrado por primera vez en 1751. El historiador y cronista uruguayo Isidoro de María (1815-1906) nos dice que desde la fundación de San Felipe y Santiago de Montevideo (1724-1726) el mando militar de la ciudad y de su jurisdicción era ejercido por la Comandancia de Montevideo, mientras el Cabildo o gobierno municipal tenía competencias económicas desde su instalación en 1730. El 14 de marzo de 1751, Montevideo se convirtió en Plaza de Armas y Gobierno Político y Militar.

Tareas de reconocimiento científico y militar de Malvinas desde el Río de la Plata (1744-1785)

De acuerdo con investigaciones realizadas por historiadores chilenos, la jurisdicción de la Patagonia Oriental y Tierras Australes, incluyendo a las Islas Malvinas, que en la cartografía de la época aparecen con el nombre de ''Islas Sansón'', correspondía a la Gobernación del Río de la Plata o del Paraguay por Real Cédula de 1570. A partir de la segunda fundación de Buenos Aires, en 1580, y durante el siglo XVII, según documenta el cronista Pedro Ordóñez, se practicó la navegación entre Buenos Aires y el Estrecho de Magallanes.

Según investigaciones del canciller argentino Héctor Taiana, publicadas en 1985, entre 1744 y 1745 se realizaron descubrimientos geográficos relacionados con las Islas Malvinas, que los cartógrafos Antonio Zatta y Juan de la Cruz Cano y Olmedilla recogieron con la intención de establecer el mapa definitivo de las Islas. En 1768, estas exploraciones fueron completadas por los navegantes españoles Manuel Pando, Teniente de Fragata, y Francisco Gil de Taboada y Lemos, Capitán, que hizo un relevamiento especial de la Isla Soledad. En 1769 Dom Pernety dio a conocer en Europa los descubrimientos realizados por Bougainville. Y en 1785 llegó hasta allí Antonio de Córdoba.

Detalle del mapa de Juan de la Cruz Cano y Omedilla (1775)













En su ''Viaje alrededor del mundo'', editado en 1772, Bougainville insertó un mapa de las Islas Malvinas, con la descripción detallada de sus costas e información histórica y geográfica de las mismas. Bougainville menciona antecedentes de exploraciones en la región: plantea que el descubrimiento de las Islas data de 1502, y es mérito de Amerigo Vespucci; de las expediciones francesas considera como un antecedente de la suya, la de Beauchesne Gouin, de 1700, y antes, la de Guillaume Dampierre, de 1683.

Bougainville reconoce haber hecho escala en la isla de Santa Catarina, en Brasil, y luego en Montevideo ''donde tomamos muchos caballos y ganado vacuno'' antes de llegar a las islas Sebaldinas el 31 de enero de 1764. No obstante haber fondeado en Montevideo y ''haber tomado'' los equinos y bovinos, Bougainville no informó sobre su misión a las autoridades del Río de la Plata, en cuya jurisdicción estaban incluidas las Malvinas desde 1617, según se ha visto, aunque luego reconoció haber actuado ilegalmente. Una parte del ganado que en 1834 Charles Darwin vió reproducirse libremente en las Malvinas, era, por lo tanto, originario de Montevideo.

Bougainville hizo tres viajes a las Malvinas; durante el primero, entre el 17 de marzo y el 5 de abril de 1764, dirigió la construcción de un fuerte y trasladó 29 personas. Durante el segundo viaje arribó a las Malvinas el 5 de enero de 1765, encontrando a los colonos en buen estado de salud, habiendo estos logrado sobrevivir mediante la caza y la pesca, salvo uno que había fallecido durante una cacería. En esta segunda oportunidad instaló nuevos colonos; el 16 de febrero se cruzó con los ingleses del Comodoro Byron.

El 27 de abril ya había 80 colonos franceses en las Islas y se había organizado una administración. La tercera expedición tuvo lugar entre el 15 y el 23 de febrero de 1766. Se detuvieron en el Estrecho de Magallanes para hacer leña y encontraron ''indios'', con los que convivieron un tiempo y que incluso subían a bordo; luego sufrieron un ataque. Además vieron patagones a caballo, señal del contacto con españoles. (Biblioteca Indiana, Tomo I, pp 692-697).

Puerto San Luis o Puerto Luis en la Isla Soledad
a principios del siglo XIX.














En 1789 se organizó una compañía marítima para fundar más poblaciones en la Patagonia. Sebastián Undiano y Gaztelu, navarro avecindado en Mendoza, planteó en 1800, un proyecto más ambicioso en ese sentido.


domingo, 27 de octubre de 2013

Sobre el nombre de esta bitácora. Por qué Indiberya (Ind-Iber-Ya)

1.     Los indo-hispanistas creemos que desde la más remota antigüedad existe una región del mundo que nuestros antepasados llamaron Indias. Las Indias no son otra cosa que la región de los grandes ríos, porque si bien Indo es el nombre de un solo río, Indus es una palabra latina tomada del griego y derivada del sánscrito donde originalmente significaba río. Indias es una palabra que no indica otra cosa sino la continuidad geográfica y humana de un mundo donde, desde la Prehistoria y hasta la actualidad, el centro neurálgico es China, India, Indonesia, Filipinas y América. El río Indo de los antiguos lo mismo podía ser el Indo, que el Ganges, el Mekong, el Yangtsé o el Amazonas.

2. Hispania no es otra cosa que el nombre, de origen incierto, que los romanos, y antes que ellos, los fenicios y los tartesios daban a toda la península ibérica, la cual, antiguamente también se llamó Iberia. Igual que las Indias, Iberia, es la región de los grandes ríos, porque Ebro proviene de Íbero que no significa otra cosa que río, y era el nombre dado por los ibéricos a todos los ríos.

3. Y, en guaraní, es lago o río, Gua es lugar, Guazú o Guasú es grande; Yguasú es la región de los grandes ríos. Indus, Iberus, Yguasú: no podemos dejar de pensar en una raíz universal I o Y para significar río.

4. De la misma forma en la expresión Abya Yala, usada por los gunas para designar a las Américas, cuya etimología ha sido interpretada de diversas maneras (Abya= salvado, guardado, en plena madurez; Yala = montaña); parece contenido el fonema y la idea, desde el momento que las montañas son lugar de nacimiento de los grandes ríos; y de que la tierra se salva, se guarda, o madura por la presencia de las aguas, que pueden ser las de los ríos, o bien porque se libra de sus excesos.

5. Indo-Iberia, Indo-hispania, Indiana, Yguasú, Abya Yala, o España e Indias, es la región de los grandes ríos, habitada por pueblos de navegantes, primero fluviales, después marítimos, recorriendo largas distancias, comunicándose entre ellos, fluyendo, como los ríos mismos, con sus tesoros culturales de todo tipo. Por contracción de los nombres anteriores tal vez habría que llamarla Indiberyala o Indiaiberya, Indiberya, (donde Ya sería tanto la contracción de Yguá como de Yala); e Iberya o Aiberya la contracción de Iberia y Abya Yala [A/I]b[er]ya [Ya][la], lo cual significaría ’’la tierra montañosa surcada de ríos’’, o bien ''la tierra alta surcada de ríos'', descripción geográfica que caracteriza bien a Hispanoamérica, con mesetas hacia el Este, montañas hacia el Oeste, y ríos caudalosos por todas partes.


Junco chino, representado en un Atlas europeo de 1519
6. De lo anterior surge que Ind/iber/ya –con la posibilidad de ser acentuada en la última sílaba para darle sonoridad indoamericana (Indiberyá), y en la penúltima sílaba para darle sonoridad latinoamericana (Indiberya)- es la contracción de nombres que representan a tres continentes: India es una palabra grecolatina de origen sánscrito; Iberia es una palabra latina de origen ibérico; Ya es la contracción de la palabra guaraní Yguá (o Guaý) y de la palabra guna Yala (o Abya Yala), que son americanas; pero Iberya también es la contracción de Abya Yala e Iberia. Su gentilicio sería indibéryco, Indiberyo o Indiberyano.


Barca mochica de totora
7. Creemos que cada una de las civilizaciones de Indoiberia, Indohispania o Indiberya ha tenido su propio ’’momento humanista’’, una fase de florecimiento cultural donde el ser humano fue el tema y la preocupación central, y que es indagando en este humanismo multicultural como podremos vivificar los valores humanistas de nuestra civilización mundial. Los hallaremos en la Península Ibérica, en África, en América, en Oceanía, en el Lejano Oriente y en otras partes del mundo.

Mapa de América del Sur y la Antártida de Hondius, 1606.























Cataratas del Iguazú:









8. Algunos latinoamericanos creen que la unidad latinoamericana debe ser pensada sin la Península Ibérica (y supuestamente también sin Filipinas, en Asia), pero entonces ¿por qué los norteamericanos y los británicos, con menos vínculos culturales e históricos tendrían derecho a una base militar en Rota o al peñón de Gibraltar? ¿Y por qué los musulmanes tendrían más derecho a reclamar Al Andalus para el Islam?

9. Ningún mito fundacional de los indígenas americanos del Caribe y del Atlántico dice que sus antepasados hayan venido del Oeste. Todos dicen que sus antepasados vinieron del Este. ¿Y qué hay al Este de América sino África Occidental y la Península Ibérica? ¡Pero qué son Rota, Gibraltar o Al Andalus comparados con la totalidad de la Península Ibérica y su proyección en el África continental e insular! ¡Qué son comparadas con el África misma, tierra que desde la Prehistoria se desborda como un río sobre España!


sábado, 26 de octubre de 2013

Una digresión en esta Bitácora ante el insólito caso de racismo europeo ''La Gitanilla Rubia''. Apostillas al artículo ''Las Leyendas Negras''

Una digresión en esta Bitácota


Ante el insólito caso de racismo europeo ''La Gitanilla Rubia''









Hace unos días, durante un allanamiento en Grecia, se encontró en una familia de gitanos de piel morena, una niña rubia y de ojos verdes de la cual se dijo que había sido robada. Ahora la reclama otra familia, también de gitanos y de piel morena, pero de Bulgaria, que dice que la dio en adopción aunque tampoco están muy seguros de que sea realmente su hija. Pero, desde el punto de vista de la fisonomía, estos gitanos se le parecen, y tienen ocho hijos de los cuales, la mitad tienen el cabello y la piel muy claros, pero se parecen a los padres por otros rasgos. La última prueba de ADN tomada estaría indicando que la niña es hija biológica de esta segunda familia de gitanos. (De esta familia ahora se dice que la vendieron).

Es evidente el interés de los países europeos por deshacerse de los gitanos. En Francia, una niña fue deportada junto con toda su familia cuando estaba a punto de empezar una excursión con sus compañeritos de clase. En Italia, los gitanos fueron expulsados primero de Roma, y luego de toda la península. Hay que saber que en el pasado, los nazis no solamente persiguieron a los judíos, a los homosexuales, a los comunistas y a los testigos de Jehová, entre otros, sino que también persiguieron y mandaron a las cámaras de gas a los gitanos. Una Europa cada vez más hitleriana no quiere tener que confesarlo, y entonces ha inventado esta historia llamada ''La Gitanilla Rubia''.











Interpol ha dicho que no está buscando a esta niña, que además habla romaní mezclado con griego, se adapta bien a entornos diferentes, tiene unos cuatro o seis años (no hay certeza, porque no fue registrada) y no parece estar extrañando a nadie. La niña responde al nombre de María.

Pero la ocasión ha sido propicia para que saltaran a la luz algunos tópicos propios del racismo. Y no hay en Europa caso más evidente de racismo que este.  En particular, existe una copiosa colección de prejuicios negativos sobre gitanos; en general existen prejuicios hacia los pueblos por diferentes razones. Un pre-juicio no es otra cosa que un juicio que se emite sin conocimiento suficiente de la cosa o persona que se quiere juzgar.

En un artículo anterior (''Las Leyendas Negras'') ya nos referimos a algunos de ellos. Hace poco más de 100 años se escribía lo siguiente sobre ''los españoles'' y sus descendientes:

''El actor criminal en nuestra campaña es el gaucho, mezcla de raza española y de raza indígena. Si el factor raza tiene influencia en la criminalidad, si la estadística no se equivoca cuando atribuye a España una gran criminalidad de sangre, el cruzamiento de esa raza con la indígena, guerrera y sanguinaria, debería producir un tipo, ya sea por herencia o atavismo, sanguinario y despreocupado por la vida. Son esas precisamente las cualidades de nuestros paisanos''. Revista Evolución, Montevideo, 1906, pág. 382.

Ahora se dice que ''el 11 de octubre fue el último día de felicidad de los pueblos indígenas'' tras lo cual advino la enfermedad, el capitalismo, la muerte, el genocidio de ¡70 millones! por parte de unos españoles que nunca fueron más de 300.000 en los 40 millones de kilómetros cuadrados que tiene América. Lo cual no hubieran logrado ni siquiera mediante una guerra bacteriológica, como se dice. La idea detrás de este mensaje es que, cual caja de Pandora, hubo una raza que, junto con la viruela, fue la transmisora de todos los males... El temor al contagio biológio y cultural entre las razas es racista.

Ahora, si combinamos los prejuicios contra el español (''es genocida''), los prejuicios contra el indio (''caníbal, perezoso''), los prejuicios contra el negro (''malo, feo''), ¡pobre de nuestra identidad latinoamericana!.

Pero el racismo tiene un repertorio de prejuicios diferente según quien se trate. A los gitanos se les atribuye, desde la Edad Media, esto de robar niños. También se dice que son ladrones, que lanzan maldiciones, que son delincuentes en general, etc.

¿Le habrán preguntado a María si quería irse o quedarse con los gitanos? ¿Alguien pensó en el daño psicológico que le podían hacer a la niña separándola de sus cuidadores (aunque no sean sus padres), exponiéndola a la mirada pública? ¿Y si sus padres biológicos la abandonaron o la dieron en adopción?

Veamos ahora qué tópicos racistas, más generales, saltaron en ocasión del ''rescate'' de María, la gitanilla rubia, llamada también por la prensa ''el ángel rubio''.

1. María es una niña de ''tipo nórdico''. (Hipótesis defendida por la policía griega).
Mapa del año 1916, localizando a la ''raza nórdica'' (en rojo).
Incluido en el artículo de Wikipedia sobre ''nordicismo''.

Según esto, la niña gitana ''debió ser robada a una familia del norte o del este de Europa''.

De acuerdo con el artículo de Wikipedia sobre ''Nordicismo'', el término nórdico:

''fue propuesto primeramente como grupo racial por el antropólogo francés Joseph Deniker. Sin embargo, fue la obra del sociólogo/economista William Z. Ripley la que popularizó la idea de las tres razas europeas haciendo uso de la terminología acuñada por Deniker (anteriormente Ripley había empleado «teutón» como designación) en su obra de referencia 'Las Razas de Europa', en la que distinguía las razas europeas basándose en diversas mediciones antropométricas y teniendo en cuenta principalmente la estatura y el índice cefálico. El teórico racialista anglogermano Houston Stewart Chamberlain, que constituiría un modelo a seguir para Adolf Hitler, concibió a los nórdicos como los pueblos celtas y germánicos originarios [término racista que últimamente se ha puesto de moda en América Latina dicho sea esto a manera de digresión], así como algunos pueblos eslavos. Todos ellos eran, a saber, los baltos, belgas, holandeses, ingleses, franceses, alemanes, irlandeses, polacos, escandinavos, escoceses y galeses''.

Esto significa que antes de Deniker (que vivió entre 1852 y 1918) nadie veía nórdicos por la calle, o viviendo entre los gitanos. Y esto hasta tal punto es así, que buscando información sobre historia de la geografía, y en particular del Estrecho de Magallanes, me encuentro la siguiente nota de Joan Blaeu (que nació en 1596 en el norte de Holanda) al pie del mapa de Tierra del Fuego: 

''Los habitantes de este lugar son blancos, lo que permite refutar el punto de vista de que las personas que viven en latitudes australes tienen la piel negra''.

Esto significa que Joan Blaeu (teóricamente un nórdico) se veía a sí mismo tan blanco como un indio de Tierra del Fuego. Y a esta percepción pretendía utilizarla para desmitificar la creencia de que la gente que vive en el sur tiene la piel oscura. ¡Cuánto más crítica e inteligente que nosotros era la gente del siglo XVII!

Este comentario de Joan Blaeu, que da a entender que la interpretación del color de la piel en las personas es subjetiva y cultural (se aprende), resulta más evidente en el siguiente mapa de 1940, que diferencia a las poblaciones por el color de la piel (y además en proyección Mercator con lo cual el hemisferio norte aparece más grande de lo que es):


La lectura de este mapa es que la mayoría de la gente en América del Sur tiene la piel oscura; sin embargo, la mayoría de los suramericanos nos percibimos como ''blancos'' a lo largo y a lo ancho del continente. Donde ''blanco'' quiere decir mestizo; pero los yankees de Norteamérica dicen que somos ''otras razas''. A la izquierda, la foto de la autora, un ejemplo de raza-otra. Para los criterios de los europeos y de los norteamericanos, no somos blancos. Y por eso en los formularios que debemos rellenar los hispanos para entrar a EEUU, somos ''otras razas'', ni ''negros'' ni ''blancos''. (En definitiva porque ''blanco'' en EEUU significa ''nórdico'').

La autora de esta Bitácora:
todo un caso de raza-otra
En el siglo XIX el nordicismo enseñaba ''que la raza nórdica estaba extendida por el norte de Europa, especialmente entre los hablantes de las lenguas germánicas, y se caracterizaba por individuos de gran estatura, rostros y cabeza alargados, pelo rubio y ojos azules''. (Y se supone que tienen la piel muy blanca o rosada). Además, cierto tipo de cráneo y de frente que determinaría la inteligencia.


Que digamos que mamá gitana..., y encima pobre y desclasada, andando en ese ambiente, mmm... ''o no es la madre o no se merece a este ángel rubio''.


Aquí tienen un grabado del año 1899. ¿Y adivinen qué? En el extremo derecho tenemos al negro, que en aquel entonces se decía que era la criatura más parecida al gorila y al chimpancé. En el centro tenemos a la especie humana en la cumbre de su evolución, representada por el anglo-teutónico, que como su nombre lo indica vive en Inglaterra, algunas partes de EEUU, Alemania, el norte de Europa, algunas partes de Sudáfrica... Y en el extremo izquierdo (que siempre es el extremo siniestro) tenemos al eireano-ibérico (de Eire, nombre indígena de Irlanda), que como su etimología lo indica se extiende a través de Irlanda, Portugal, España, quizá la península de Bretaña... con una apariencia de hombre-mono (de Neanderthal) que mata ''¡Y esta fue la gente que osó poner el pie en América el 12 de octubre pudiendo haberlo hecho los anglo-teutónicos!¡No se lo merecían!¡El comienzo de la degeneración!''.











2. Raza y linaje

Es posible que la palabra raza sea de origen árabe (rā's) donde significa ''cabeza, inicio, origen''. O también que en árabe tenga el mismo origen que en español.


El pensador español Miguel de Unamuno decía que raza y raya son dos palabras emparentadas que significan hilo, hebra. En su libro La Raza y la Lengua (1884-1936) escribió lo siguiente:


''Raza quiere decir lo mismo que raya o línea [...] Y la raza histórica -no naturalística-, humana, -no animal- es algo no hecho, sino que está haciéndose de continuo, que mira al porvenir y no al pasado. Y en cuanto mira al pasado, se llama más bien abolengo, que deriva de abuelo''.

Si abrimos el Diccionario de la Real Academia Española nos encontramos con las siguientes acepciones:

raza.

(Del lat. *radĭa, de radĭus).

1. f. Casta o calidad del origen o linaje.

2. f. Cada uno de los grupos en que se subdividen algunas especies biológicas y cuyos caracteres diferenciales se perpetúan por herencia.

3. f. Grieta, hendidura.

4. f. Rayo de luz que penetra por una abertura.

5. f. Grieta que se forma a veces en la parte superior del casco de las caballerías.

6. f. Lista, en el paño u otra tela, en que el tejido está más claro que en el resto.

7. f. Calidad de algunas cosas, en relación a ciertas características que las definen.

~ humana.

1. f. humanidad (‖ género humano).

de ~.

1. loc. adj. Dicho de un animal: Que pertenece a una raza seleccionada.

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De manera que en español hay muchas acepciones que nos remiten a las ideas de hilo, grieta, hendidura, rayo, línea, linaje, origen, a su calidad (la calidad de un linaje tenía que ver con los méritos de sus fundadores, o simplemente con sus características), y solo una que se refiere a las especies biológicas en general. De donde se infiere que la categoría raza en español, entendida en sentido racista es un préstamo o importación de otras culturas.

Pero como la Leyenda Negra anti-hispana todavía tiene mucho que hacer en este mundo, ha surgido una corriente que culpa a España de la invención del término raza en sentido racista y del racismo mismo. Para esto se recurre a la interpretación interesada de dos hechos:


1. La ''limpieza de sangre''.

2. El sistema de ''castas''.

En el primer caso está claro que la sangre de la que se habla no es literal sino metafórica. No es biológica sino basada en el mérito. Se refería a pertenecer o venir de una familia reconocida por su aporte a la comunidad. La familia gozaba del prestigio que le proporcionaban sus miembros más distinguidos: los nietos de los abuelos, por ejemplo. Porque en ese caso uno había sido criado y educado como Dios manda. Que esto se mezclaba con la lucha entre religiones, favoreciendo a los ''cristianos viejos'' es cierto, pero entonces tenía más las características de una lucha ideológica, entre grupos de poder, o entre civilizaciones, que de una discriminación étnica. 


Hasta tal punto es así, que en el siglo XVII todavía existía la posibilidad de que el Imperio Turco, -una potencia de primer orden en el Mediterráneo- pudiera, apoyándose en la comunidad islámica de España, adueñarse del país. Que no haya ocurrido no quiere decir que no hubiera podido ocurrir. Que se sepa, durante la Segunda Guerra Mundial, a los japoneses que vivían en EEUU no solo no les dieron ningunos altos cargos sino que los recluyeron en campos de concentración como medida ''preventiva''. Lo mismo ocurrió durante décadas con los rusos y sus partidarios los comunistas.


Por cierto, en los EEUU actuales no solo no se ve ningún musulmán en un alto cargo, sino que a los más sospechosos los recluyen en un campo situado fuera de su propio país, en la base colonial de Guantánamo, en Cuba. (Barack Husein Obama no lo es, porque oficialmente hace 20 años se convirtió al cristianismo después de haber nacido de madre metodista y padre de origen musulmán pero ateo. No obstante ha sido mantenido bajo sospecha por sus detractores).


En cuanto al judaísmo, hay que saber que hubo momentos en los que fue tan popular en España que la Iglesia católica temió ser desplazada por la comunidad judía, y esta lucha por el poder explica tanto la expulsión de los judíos como el requisito de limpieza de sangre.


No es que estos contextos no sean caldo de cultivo para el racismo. Por ejemplo, la competencia entre trabajadores nacionales y trabajadores inmigrantes, lo alienta en Europa, en Rusia, en EEUU, en países de América Latina. El origen y la apariencia de las personas se transforma en una excusa para desplazar a un competidor. Hasta cierto punto esto forma parte de la dinámica social normal hasta que se vuelve enfermizo.


Pero hay que distinguir entre el racismo de tipo medieval que no se basa en el origen biológico de las personas sino en la religión, y donde la religión era la ideología para la dominación y penetración de unos Estados sobre otros, y el racismo moderno, que crea la categoría ''raza'' basándose en taxonomías de tipo zoológico y luego la aplica, de forma enfermiza con fines múltiples, algunos de ellos gratuitos. El racismo medieval era un tipo de discurso que apoyaba las prácticas competitivas de unos grupos contra otros, pero que desaparecía cuando no había un adversario real de por medio; el racismo moderno es una patología social que tiende a cristalizarse y hacerse permanente, donde el fuerte se ceba con el débil.


Por razones históricas el racismo moderno no podía surgir en España, sino en sociedades ''modernas'' como Inglaterra, Francia, Holanda, Alemania y EEUU, que generaron formas de Estado, de explotación social y de colonialismo e imperialismo ''modernos''.


Lo primero que hace el racismo moderno es crear la categoría seudocientífica de raza (es decir, que pretende ser científica pero no lo es), desconocida en la Edad Media. Esta elaboración se hizo en los siglos XVIII y XIX, con los mismos criterios que se aplicaban a los animales:


''Las siguientes deducciones fueron hechas [por la Sociedad Antropológica de Londres]: 


''1º.- Que hay tantas razones para clasificar al negro como una especie distinta al europeo como las hay para hacer del asno una especie distinta de la cebra; y si tomamos en consideración de la clasificación la inteligencia, hay más diferencia entre el negro y el anglosajón que entre el gorila y el chimpancé. 


''2º.- Que las analogías son más numerosas entre el negro y los monos que entre el europeo y los monos.


''[...] 4º.- Que el negro es más humano en su natural subordinación al europeo que bajo cualquier otra circunstancia [...]''. Sesión científica de la Sociedad Antropológica de Londres del 17 de noviembre de 1863. La Enciclopedia Británica en su edición de 1911, mantuvo este concepto.

Por oposición, en su Ensayo sobre la desigualdad de las razas humanas (1853 y 1855), Arthur de Gobineau (1816-1882), describió de la siguiente manera el ''tipo nórdico'':


''El color de los arios era blanco y rosado: así fueron los griegos y los persas más antiguos, tales se mostraron también los hindúes primitivos. Entre los colores de los cabellos y de la barba dominaba el rubio, y no puede olvidarse la predilección que por este color sentían los helenos: no concebían de otra manera a sus divinidades más nobles''.




Del texto surge que el nordicismo no solo se inspiró en clasificaciones zoológicas de la especie humana, sino que también apeló a supuestos modelos ''clásicos'', por ejemplo de la Antigua Grecia. ¡Lo que es no haber leído nunca a los escritores griegos y a los escritores antiguos en general!


Heródoto (nacido hacia el año 484 a. C. en la ciudad doria (esto es, ''aria'', ''indogermánica'' de Caria, en Anatolia) de Halicarnaso, dice sobre los etíopes (''cara quemada o negra''):


''Los etíopes son los más altos y bien hechos de todos los hombres. Su entendimiento es vivo y fuerte''.


La Reina Tiy o Teye, modelo de belleza
negra para los pueblos antiguos.
Fue madre de Akenatón y Gran Esposa
Real de Amenofis III.
O sea, todo un modelo de inteligencia y belleza física. Pero además, un modelo de belleza moral (para los griegos la una no era separable de la otra): 

''Los etíopes son los más justos y piadosos de todos los hombres [...] sus sacrificios son los que más agradan a Zeus'' [...] A causa de ello son los más longevos entre todos los hombres''.

Y para rematarla, el ''ario'' Heródoto (hijo de un pueblo que hasta usaba la cruz esvástica como símbolo) cuenta cómo el Rey de los negros (''etíopes'') humilló al ''ario'' Cambises, Rey de los persas:


''Cuando Cambises para sorprenderlos les envió embajadores y regalos [...] el Rey de los etíopes, queriendo regalar a su manera al Rey de los persas, tomó un arco que apenas un persa podría levantar, y menos tirar con él, y estirándolo en presencia de los embajadores, les dijo:


''Ved aquí el consejo que el Rey de Etiopía da al Rey de los persas: Cuando estos puedan servirse tan fácilmente, como yo lo hago, de un arco de este grandor y fuerza, vengan a atacar a los etíopes, y traigan más tropas que las que tiene Cambises. Mientras tanto den los persas gracias a los dioses, porque no han puesto en el corazón de los etíopes el deseo de extenderse fuera de su país''.


Y esta no es una referencia aislada, porque en toda la literatura greco-latina se encuentran juicios semejantes. Una versión del mito de la fundación de Roma dice que Rómulo era etíope. Los etruscos lo representaban como un individuo de piel más bien oscura. Los romanos admiraban a los negros por su porte elegante.


Cántaro griego s. V a.C
Créditos: Sailko
El profeta Isaías describe a los etíopes de manera muy similar a como lo hace Heródoto: ''la gente esbelta, la gente soberbia, la gente de brillante piel''.

Los antiguos griegos creían que estaban emparentados con los persas y los etíopes a través de un personaje mitológico llamado Perseo, hijo de Dánae, abuela de los dánaos o griegos, y esposo de Andrómeda, de origen etíope. ¿Cómo podían afirmar los griegos que estaban emparentados con los negros? Porque el suyo no era el concepto de raza, como categoría biológica, sino de linaje, como genealogía.


Durante la Edad Media los reinos africanos fueron considerados grandes potencias, y sus Reyes, gente muy sabia. Así nos los presenta el Atlas catalán de 1375:



Vemos una serie de Reyes en el norte de África.









Como este Rey de Malí, malinké o mandinga:


En el siglo XV, Etiopía era una potencia económica y cultural famosa por sus libros. 


En Somalía había comerciantes negros que comerciaban con la India: los swahilis. En 1498, cuando Vasco da Gama ''descubrió'' la ruta a la India, lo hizo acompañado de un piloto swahili. En Tombuctú se despejaban ecuaciones matemáticas que en París los universitarios no lograban resolver. 


Páginas de un libro de Tomboctú (Malí) conteniendo
cálculos matemáticos y astronómicos
El Reino del Congo tenía embajada en Portugal.

Está claro el respeto que se tenía por los negros y que después se perdió. Y está claro que el nordicismo no surgió con los griegos, ni con los romanos, ni con los hebreos, ni en la Edad Media, y ni siquiera en los primeros siglos de la Época Moderna. Es claramente una creación de los siglos XIX y XX. 

Busto de un etíope (1600-1615)
Créditos: Museo del Prado, España
La historia de que Noé maldijo a Cam diciéndole que sería esclavizado por sus hermanos, empezó a ser difundida por los calvinistas recién en el siglo XVII. Bartolomé de Las Casas no solo no propuso la esclavitud del negro sino que la combatió a través de su Brevísima relación de la destrucción de África, que es el equivalente de la Brevísima relación de la destrucción de las Indias pero para el continente negro.

Ahora bien, en el siglo XVI la sociedad americana empezó a organizarse como sistema de ''castas''. Veamos cuáles son las acepciones de esta palabra en español:

casta.
(Der. del gót. kastan; cf. ingl. cast).
1. f. Ascendencia o linaje. Se usa también referido a los irracionales.
2. f. En la India, grupo social de una unidad étnica mayor que se diferencia por su rango, que impone la endogamia y donde la pertenencia es un derecho de nacimiento.
3. f. En otras sociedades, grupo que forma una clase especial y tiende a permanecer separado de los demás por su raza, religión, etc.
4. f. Especie o calidad de algo.
5. f. Zool. En una sociedad animal, conjunto de individuos especializados por su estructura o función. Se usa en especial referido a los insectos sociales, como la obrera en una colmena.

La acepción 1, que es la de ''genealogía'' ya la vimos, y explica por qué los griegos, que elogiaban a los etíopes, creían que estaban emparentados con los negros a través de Perseo y Andrómeda. Es evidente que en América un negro, un español y un indio podían tener la misma genealogía. Lo primero que hicieron las élites españolas e indígenas fue unirse mediante matrimonios políticos. Y entre los ''españoles'', como entre los portugueses, venía más de uno de ascendencia negro africana.

La acepción 3 es lo que la sociología llama ''estamento'', que era la organización social universal del Antiguo Régimen, porque no había otra. Veamos qué significa estamento en castellano:

estamento.
(Del b. lat. stamentum).
1. m. Estrato de una sociedad, definido por un común estilo de vida o análoga función social. Estamento nobiliario, militar, intelectual.
2. m. En la Corona de Aragón, cada uno de los estados que concurrían a las Cortes. Eran el eclesiástico, el de la nobleza, el de los caballeros y el de las universidades o municipios.
3. m. Cada uno de los dos cuerpos colegisladores establecidos por el Estatuto Real, que eran el de los próceres y el de los procuradores del reino.
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De donde se infiere que la divisoria más importante no está dada por la raza en el sentido de clasificación de los seres humanos hecha con criterio de taxonomía zoológica.

Los cuadros de castas del siglo XVIII en América española son muy ilustrativos en este sentido:



































Primero, porque no están basados en el ''apartheid'' o aislamiento genético como en el modelo anglosajón, sino, por el contrario, en la mixigenación o mezcla genética. (Hay que recordar que en EEUU las leyes antimixigenación estuvieron vigentes hasta 1967, ¡sí, en el modelo ''non plus ultra'' de democracia!, y en Sudáfrica hasta 1992).

Segundo, esta tendencia a la mixigenación o intercambio genético (y cultural) en el sistema de ''castas'' de la América española, impidió la formación de verdaderas ''razas'' según los criterios nordicistas.

Tercero, que según este cuadro, un ''español'' puede ser alguien cuyo abuela sin ir más lejos sea una india americana, y no necesariamente una española. Como puede leerse en el cuadro ''Español con India, Mestizo. Mestizo con Española, Castizo. Castizo con Española, Español''.


También según el cuadro anterior existen unas 13 combinaciones posibles de indios, negros y españoles, que llegado el momento serían imposibles de diferenciar si no fuera por la genealogía. Únicamente rememorando una genealogía que podía incluir 8 generaciones se podía saber, por ejemplo, quién era un ''cambujo''.

La raza es una categoría biológica que parte del supuesto de que los genes que se heredan son siempre los mismos, y además los rasgos que determinan son claramente visibles. Pero en el sistema de castas de la América española, para que nazca un cambujo, se necesitan tantas mezclas, y es tan difícil diferenciar a un cambujo de otras mezclas, como podría ser ''mulato'', ''morisco'', ''chino'' o ''albarazado'' que es evidente que no estamos hablando de razas en sentido biológico, sino de linajes o genealogías, porque no hay otra manera de determinar quién es qué.

Ahora, volviendo a nuestra gitanilla rubia, y siguiendo el criterio hispano, nada impide que si la abuela de la niña era rubia, por más que la madre sea morena, la nieta sea rubia. La abuela, la madre y la niña forman parte de una misma genealogía o linaje, por más diversa que sea su apariencia.


Claro está, que para que este fenómeno se dé con cierta frecuencia, se necesita una sociedad de linajes muy mezclados, como es la sociedad gitana, y como también es la sociedad hispanoamericana. Esto nos lleva a otro tema:

3. La variabilidad racial

En América Latina se da que unos padres pueden tener cinco hijos, de los cuales, uno es blanco, el otro es negro, el otro es indio, el otro es rubio y el otro es mezclado. Pero todos tienen el mismo ''aire de familia''. Esta variabilidad se origina en el sistema de castas, que difumina los límites entre ''razas''.

''Razas colombinas'' es el título de esta fotografía que muestra la
variabilidad racial en Colombia, surgida del sistema
de castas hispanoamericano.





















4. Rodoqueratinismo. Los pelirrojos no son una raza, sino gente que en lugar de producir un pigmento llamado melanina (que da a la piel de las personas una tonalidad marrón), producen un pigmento llamado rodoqueratina (que da a la piel y al cabello de las personas una tonalidad roja). No solo hay pelirrojos ''blancos'', sino pelirrojos ''negros'', pelirrojos ''amarillos'', etc. Se puede entender como una mutación genética que aparece y desaparece en cualquier grupo humano.















5. Albinismo. El albinismo es la ausencia de melanina en la piel, el pelo y los ojos, pero hay muchos casos posibles, y por razones genéticas, no se da de la misma forma en todos los pueblos. También se produce por mutación genética.

Esta niña de Honduras manifiesta un tipo de albinismo consistente en piel y pelo blanco y ojos rojizos.

Niña albina, en una familia de Honduras
Créditos: ms. donna.

























Entre los indios guna de Panamá la frecuencia de albinos es insólita: 1 de cada 146 gunas es albino, cuando en el resto del mundo la proporción es de 1 cada 17.000 personas. Pero entonces, no tienen el cabello blanco sino rubio (amarillo intenso, platinado), ni la piel blanca sino rosada, y los ojos no siempre son rojizos, sino grises, azules, verdes y hasta café:

Fuente y créditos: El blog de Felipe Argote












Fuente: Los indios blancos de Panamá.













Compare con María, cuya piel y cabellos son del mismo color. Los ojos resultan diferentes porque no son oblicuos como los de los indios americanos. Los labios son más finos:













Los ojos de los albinos se ven rojos o violetas por la extremadamente baja presencia de melanina, lo cual trasluce los vasos sanguíneos, y resulta exagerado por el flash de la cámara:





En las formas más leves de albinismo el color de los ojos es típicamente azul, y puede llegar al marrón. El verde representa una cantidad intermedia de pigmentación. Los ojos violetas, como los de Elizabeth Taylor son típicamente albinos y es muy raro hallarlos en no albinos, realzados en el caso de Taylor por efecto del colorante negro del maquillaje y del tono que se ha dado a la piel:



6. Eumelaninismo y feomelaninismo. Los rubios no son una raza, sino un grupo de personas (porcentaje variable en cada población) que en lugar de producir mucha cantidad de un pigmento llamado eumelanina de color negro o marrón en el pelo, producen feomelanina de color rojo, también en mucha cantidad afectando la coloración de su cabello, lo cual se da con cierta frecuencia entre pueblos que no son europeos, aunque en Europa la frecuencia sea mayor. Cuanta más feomelanina se produce, más rubio el cabello. El 2% de toda la población mundial es rubia. Por lo mismo, los ojos claros y la piel clara se dan en todas partes del mundo, aunque puedan ser más frecuentes en el norte de Europa. (En algunos casos muy frecuentes).

Hay tantos rubios en las islas Salomón de Melanesia (desde tiempos prehistóricos) como en Irlanda, aunque el gen que produce el color amarillo platinado en unos y otros no sea el mismo:

Fuente: http://nuevamentes.blogspot.ch











Chico rubio de Melanesia


Precisamente en Irlanda, donde el porcentaje de rubios es alto, es donde encontramos el linaje clasificado como X2j (prehistórico), que está emparentado con el linaje X2a de los indios norteamericanos. En una palabra, el cabello rubio no es garantía de nordicismo o pureza racial nórdica.




































Niño negro africano de ojos claros, por Vanessa Bristow
Zimbabwe, África.















Niño chino, de piel rosada y ojos verdes.

















Niña china de cabellos rubios. Fuente: youtube









Mujer afgana de ojos muy claros
















Chica bereber de cabellos y ojos claros (Norte de África)

























































7. Genotipo y fenotipo. El genotipo es la información genética que tenemos bajo la forma de ADN, y que unida a la influencia del ambiente determina las características del organismo o fenotipo. La información del genotipo puede manifestarse o no en el fenotipo.

El error del racismo es creer que la apariencia física de una persona es la expresión de la totalidad de su herencia genética. La realidad es que el color de los ojos, del pelo y de la piel viene determinado por unos pocos genes, mientras que hay muchos otros genes que determinan características que no podemos ver a simple vista. 

Una persona rubia y una negra pueden tener muchos genes en común, aunque el color del pelo y de la piel sean producidos por unos pocos genes diferentes.

Las combinaciones genéticas que producen el color del pelo son complejas. Hay por lo menos dos pares de genes que controlan el color del pelo. El par marrón/rubio tiene un alelo (o forma alternativa) marrón dominante y otro rubio recesivo. Para tener el pelo marrón hay que tener alelos marrones, la falta de alelos marrones produce el pelo rubio. Esto explica que dos padres de pelo marrón puedan tener un hijo rubio. En el par rojo/no rojo, el alelo no rojo, que suprime la producción de feomelanina es dominante, mientras el rojo es recesivo. Según las combinaciones el pelo puede ser rojo, pero también castaño rojizo o anaranjado.

El color de pelo rubio en Europa es causado por el gen MC1R, producto de una mutación genética que se produjo hace 11.500 años, y que dio lugar a diversos tonos dependiendo de la mayor o menor cantidad de melanina, lo cual a su vez permitió procesar la vitamina D y evitar el raquitismo. Este gen produce una gama muy amplia de tonalidades de rubio, que no se ven en otras partes del mundo.

El color de ojos depende de la cantidad y distribución de melanina en el iris y es un proceso en el que intervienen muchos genes. Es un mecanismo que regula la absorción de ondas de luz de diversa frecuencia. Se necesitan varios tipos de melanina, feomelanina y lipocromo, para producir el color de ojos. El color verde y azul dependen del gen EYCL1, y el color marrón del gen EYCL2. Las variaciones de color se explican por polimorfismos de nucleótidos simples. Los colores gris y ámbar todavía no han podido ser explicados.


Los ojos celestes o azules no dependen de la presencia de un pigmento azul, sino marrón o negro en pequeñas cantidades en el estroma del iris. Es un rasgo poligénico (depende de muchos genes) y sería resultado de una mutación genética que se produjo hace 6.000-10.000 años al noroeste del Mar Negro. La mutación genética habría afectado al gen OCA2, interrumpiendo su capacidad para producir ojos color café.

Precisamente en Islandia y Escandinavia, que es donde encontramos el mayor porcentaje de personas con ojos azules, es donde también hallamos el linaje que ha sido clasificado como R ADN Y, común con los indios norteamericanos. En Islandia, concretamente, se halla el linaje clasificado como C1e (altomedieval), de origen indio americano, lo cual demuestra una vez más que los ojos azules no son garantía de nordicismo o pureza del ''tipo nórdico''.

Vea en esta bitácora el artículo: ''Cuando América indígena descubrió y conquistó el norte de Europa''.


En cambio, los ojos verdes son resultado de la presencia de un pigmento color ámbar o marrón claro del estroma, combinado con el efecto que produce la dispersión de la luz reflejada. Son de origen poligénico y resultado de muchas variantes e interacciones genéticas.

El color de piel claro u oscuro se da en muchas poblaciones a la vez, producido por genes diferentes. Por lo tanto, no está indicando el mismo origen genético. Al mismo tiempo, colores diferentes de piel pueden provenir de un mismo gen. Las diferencias de color de piel entre europeos, africanos, asiáticos y amerindios dependen de un único gen, el SLC24A5, pero son los alelos los que determinan las diferencias.

8. Árboles filogenéticos y clados (ramas). Por las razones indicadas, la ciencia abandonó el concepto de raza y recuperó el de linaje. Las variaciones de ADN mitocondrial o linaje femenino pudieron remontarse hasta una Eva mitocondrial, hace 200.000 años. Eva mitocondrial produjo el linaje L, que en el transcurso de los milenios se fue diferenciando. 

En cambio, los haplogrupos del cromosoma Y determinan la línea patrilineal. Estos estudios demuestran que la especie humana se formó en la región subsahariana de África. Adán cromosómico Y habría dado origen al linaje A. Los primeros grupos patrilineales fueron A, B y E dentro de África, mientras que D y C se formaron fuera de África.

En esta clase de estudios, lo importante no son los genes que determinan el color del pelo, de la piel y de los ojos, sino otra clase de herencia. Y así como algunos romanos y griegos pensaban que Rómulo era etíope, que Andrómeda era etíope, y que la humanidad misma se había originado en los Montes de la Luna, al sur de Etiopía, hoy se tiende a pensar que los antepasados de la humanidad se originaron en el este de África. Luego, una lenta acumulación de mutaciones, fue modificando el aspecto de las personas hasta llegar al rubio de ojos claros. Según esto, existe un solo gran linaje humano y es el africano. Todos somos afrodescendientes.





9. Huella genética y prueba de paternidad.


La policía griega afirma que según la prueba de paternidad, María no es hija biológica de los cuidadores gitanos con los que fue encontrada.


En la actualidad, la prueba de paternidad consiste en comparar el ADN nuclear de padre e hijo, que hereda un alelo de la madre y otro del padre. Un hijo debe tener para cada locus un alelo de su padre. El proceso consiste en comparar locus del hijo, del padre y de la madre, en regiones que son muy variables para cada individuo y que se llaman STR.





Sin embargo en las pruebas de ADN puede haber errores, porque las muestras pueden estar contaminadas. Esto último ha llegado a destruir familias.



Así, el racismo en el caso de María, consiste en partir del supuesto de que María es parte de una raza con rasgos biológicos visibles y hereditarios, y no de un linaje, que es un concepto mucho más amplio y complejo.


El último estudio de ADN realizado indica que esta mujer morena y este hombre todavía más moreno son los padres biológicos de María, lo que pone en entredicho la existencia de una ''raza nórdica'', y demuestra en cambio la universalidad de determinados rasgos (rubios de ojos claros, piel clara y cabellos claros) en todos los linajes humanos.